lunes, 23 de mayo de 2016

La ULPGC mola un pegote.


Según el último U-Ranking, la clasificación elaborada por el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas y la Fundación BBVA, la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria ocupa la 52ª posición en el ranking de universidades españolas. La 52ª posición de un total de 61. Lo cual no es especialmente sorprendente.

Los parámetros que utiliza este sistema para clasificar las universidades son el rendimiento docente, el rendimiento investigador y los resultados de innovación y desarrollo tecnológico. Pero estoy segura de que, si incluyeran la eficacia de los organismos burocráticos, la ULPGC tendría una clasificación para ella sola. Y quedaría en última posición. En el subsuelo. Con las lombrices.

¿Por qué estoy contando esto? Desde que entré a estudiar en la ULPGC, por ahí por el año 2009, jamás había tenido un problema de tipo administrativo, a pesar de que conozco a muchísima gente que no sólo los ha tenido, sino que se repiten una y otra vez, curso tras curso. Es por todos bien conocida la supuesta incompetencia del personal administrativo de la ULPGC, sin distinguir entre facultades o vicerrectorados. Por primera vez, en el 2016, he podido comprobarlo por mí misma. Y casi los mato.

Por eso, he decidido dedicar un pequeño espacio de este, mi querido blog, a recopilar algunas grandes pifias de las administraciones de la ULPGC. ¿Para qué? ¿Acaso va a servir de algo? Por supuesto que no. Pero quiero quejarme. Quiero quejarme fuerte.

Ejemplo nº 1. ¡Estoy estudiando gratis!

Éste es el que me sucedió a mí. En marzo de este año salió una convocatoria de becas de colaboración en institutos tecnológicos, que las lleva el Vicerrectorado de Investigación, Desarrollo e Innovación. Siguiendo minuciosamente las instrucciones que recogía la convocatoria, junté toda la documentación que me pedían, y la envié. Hasta aquí, todo correcto.

A los dos meses, al vicerrectorado le dio por sacar la resolución provisional. Cual fue mi sorpresa cuando vi que no habían aceptado mi solicitud, a pesar de que presenté todos los papeles en regla. Pero no sólo eso: junto conmigo, se habían cargado a un mogollón de solicitantes.

Cuando llego a la parte en la que describen los motivos por los que se han denegado las solicitudes, ATENCIÓN: «El resguardo del pago de las tasas del título en curso no tiene el sello de la entidad bancaria, por lo que no se acredita el pago de las tasas».



Lo primero que pensé fue: "No, no, no. Aquí está fallando algo".

Recupero el resguardo del pago de las tasas, y efectivamente: no tiene el sello del banco. Pero, en su defecto, lo que figura es el código impreso que te dejan en el papel cuando pagas cualquier cosa en ventanilla y el señor o la señora del banco lo pasa por esa especie de impresora. Vale que se había impreso justo encima de la tabla donde aparecen las asignaturas, pero no hay que ser un hacha para verlo.

O sea, que el Vicerrectorado había denegado mi solicitud porque, según ellos, no había pagado las tasas de matriculación de los estudios de este año.

Ergo, según ellos, llevo desde septiembre estudiando gratis.

Y, sin embargo, ahí estaba el código que acreditaba que las había pagado.

Porque es que, si no pagas las tasas, NO PUEDES ESTUDIAR.

Y ESTAMOS EN MAYO.

Y NADIE ME HA DICHO NADA SOBRE LAS TASAS NI SU PUTA MADRE.

Pero bueno, antes de que me diera un ictus del enfado, decidí intentar subsanar el percal, ya que tenía dos semanas para reclamar. Al día siguiente fui al banco y le expliqué al señor de la ventanilla lo que había pasado, y que necesitaba que me pusiera un sellito.

- No es por nada, pero el número que tienes ahí es la verificación mecánica. Eso acredita que el pago está hecho.

- Ya, ya lo sé. Pero me han dicho que necesito un sello de la entidad bancaria para acreditar el pago de las tasas.

- Pero es que yo no te puedo poner el sello.

- ¿Por qué no?

- Porque ya tienes ahí la verificación mecánica.

- Que sí, que lo entiendo perfectamente. Pero es que eso no les vale en la universidad. Necesito el sello.

- Pero es que las tasas ya están pagadas. ¿Para qué quieres un sello?


Antes de arrancarle la cabeza al caballero, decidí probar en otra oficina. En la segunda tuve más suerte, y la mujer que me atendió me puso el sello. Comprobando antes A TRAVÉS DE LA VERIFICACIÓN MECÁNICA que el pago, efectivamente, se había efectuado. Y compartiendo conmigo la idea de que, en la ULPGC, son todos idiotas.

Esa misma tarde envié la alegación con el dichoso papel y el sellito de los cojones para que en el Vicerrectorado se lo metan por donde les quepa.

En este momento sigo a la espera de la resolución definitiva de la convocatoria de becas. Pero, no sé por qué, me da que no me la van a conceder. Seguramente se inventarán cualquier otra chorrada para denegármela. Como a uno que en la provisional le rechazaron la solicitud porque, ojocuidao: «No se aporta el documento que acredita la personalidad del solicitante (el documento aportado no es completamente legible)». O sea, porque la fotocopia del DNI salió borrosa.

Tócate los huevos.

Ejemplo nº2. ¿Pero me puedo pasar al Doble Grado o no?

Éste es el caso de una chica que, cerca de acabar el curso, se acercó a la conserjería de la facultad de Traducción e Interpretación para pedir información sobre cómo pasarse al Doble Grado. La señora al otro lado del mostrador, muy poco entendida en el tema, la dirige a Administración, y allí le explican, con el mayor de los convencimientos, que el trámite exige presentar una cantidad ingente de papeles que luego deben remitirse al vicerrectorado pertinente para ser sellados, firmados y compulsados para, finalmente, efectuar el traslado del expediente. En resumidas cuentas, que era un proceso muy largo y que, a aquellas alturas, no merecía la pena intentar porque no iba a entrar en plazo. Esta chica, desilusionada y triste por su mala suerte, se resignó a intentarlo de nuevo en septiembre.

A comienzos del curso siguiente, esta pobre muchacha va a Administración a pedir que le repitan los papeles que tiene que presentar para empezar a gestionar toda la burocracia con tiempo para que no le volviera a pasar lo que en el curso anterior. En la administración le atiende una señora totalmente diferente a la primera, y le informa de que lo que le habían contado era completamente erróneo. Que era cierto que tenía que presentar mucha documentación, pero que había habido una convocatoria en julio a la que se podía presentar perfectamente; y que, con suerte, era bastante probable que hubiese entrado. Que quién demonios le había contado aquella trola.



Ejemplo nº 3. Me gustó tanto esa asignatura que lo voy a cursar otra vez.

Un chico que cursa ADE aprobó en su momento la asignatura Derecho Civil y Mercantil, de primer curso. Bien por él. La cosa es que, dos años después, mientras estaba eligiendo las asignaturas de tercero, el sistema informático le obligaba a elegir las pendientes de primero. Y, ¡sorpresa! A pesar de estar aprobada desde hacía dos años, Derecho Civil y Mercantil aparecía como suspendida, y por ende, le obligaban a matricularse en ella - y a pagarla.

Nuestro protagonista, a la luz de los acontecimientos, fue a la administración de Empresariales para arreglar el error. Pero no. El personal de la administración le juraron y perjuraron que, en el sistema, esa asignatura aparecía suspendida. El muchacho, con toda la razón del mundo para estar enfadado, se quejó al departamento pertinente en la facultad de Derecho. Los profesores removieron cielo y tierra hasta encontrar el famoso examen de dos años de antigüedad que, finalmente, y contra todo pronóstico, resulta que estaba suspenso.

El resumen de esta historia es que los profesores de Derecho asumieron su error al pasar las notas, pero que, igualmente, este chico estaba suspendido. Y que, además, la culpa en última instancia era suya, ya que, atención: era su responsabilidad comprobar que la nota que figuraba en las actas del Campus Virtual coincidía con la del documento que ellos habían subido, y en el que aparecía que estaba aprobado por un error del cuerpo docente


Lo peor de todo es que el pobre chico tuvo que volver a matricularse de esa asignatura en tercero, pagar por ella, y aprobarla de nuevo.

Ejemplo nº 4. Que sí, mi niña. Tú matricúlate.

Esta anécdota también tiene lugar en la facultad de Traducción e Interpretación. Mientras hacía la matrícula para el tercer curso de Traducción e Interpretación Inglés-Alemán, se da cuenta de que no le llegan los créditos, y tiene pendiente una asignatura de segundo. Por lo tanto, al matricularse de la de segundo, una de las de tercero se le quedaría fuera. 

Esta chica, alarmada, llama a la Unidad de Estudiantes para que la asesoren. La señora al otro lado del teléfono, después de comprobar y requetecomprobar el número de créditos de la asignatura de segundo, le dice lo siguiente: que se matriculara en la materia de segundo, y que si la aprobaba en la convocatoria Especial o Extraordinaria, antes de que empezara el curso, podía matricularse en la que dejaba fuera de tercero. Es decir, si aprobaba la de segundo, una vez se la quitara de encima, podía llenar el hueco que dejaba ésta por la de tercero.

La chica confió en aquella señora que había contado hasta la saciedad el número de créditos disponibles, e hizo lo que le recomendó. ¿Por qué iba a engañarla esa señora?

La muchacha aprueba la famosa asignatura de segundo. Pero, ¡oh! En enero le dicen que aquello que le habían contado era completamente falso; que jamás de los jamases se había hecho una gestión como ésa y que era imposible que se matriculara de la asignatura de tercero en tercero. Nuestra pobre amiga, gracias a las sustancias bajo las cuales debió de hablarle la señora de la Unidad de Estudiantes, se enfrenta a una asignatura infernal de tercero en cuarto curso, junto con las prácticas y el Trabajo Fin de Grado.


Pero esto no acaba aquí. La mejor parte de esta historia es que, después de enviar una reclamación al Rectorado, no-sé-cuántas semanas después, suena el teléfono.  

- Buenos días. ¿Eres X, la de la solicitud de Traducción e Interpretación? Llamaba para decirte que se ha aprobado, y que puedes matricularte sin problemas.

Y DOS MINUTOS CONTADOS después, vuelven a llamar.

- Oye, mira, que ha sido un error. Que no han aprobado la solicitud.


Ejemplo nº 5. No computa.

Seguimos en Traducción e Interpretación. A una chica le llegan de golpe tres correos con la siguiente información: «Del grado de Traducción e Interpretación Inglés-Alemán, la asignatura X no computa en esta convocatoria». 

Nuestra protagonista, alarmada (ya que estaba segura de que aún le quedaban convocatorias), acude rauda y veloz a la administración de la facultad a preguntar qué ha pasado y qué demonios es eso de "no computa".

La respuesta unánime de las cuatro señoras administrativas presentes fue la siguiente:


Por sugerencia de las señoras, la chica va desde la facultad, en Tomás Morales, a Servicios Administrativos, en San Roque. Es decir, a tomar por culo. Allí le responden lo siguiente:


Finalmente, el día fue salvado gracias a una adorable mujer que estaba junto a la facultad de Ciencias de la Educación dando información a los chavales de Bachillerato sobre los Grados Universitarios. Es decir, gracias a una persona totalmente ajena a la facultad y a la administración.

A los acontecimientos me remito.

ULPGC: a ver si aprendes a hacer bien tu puto trabajo.


martes, 10 de mayo de 2016

Mierdisinopsis III


Por algún extraño motivo, las películas de Capitán América despiertan en mí la necesidad de hacer mierdisinopsis.


Capitán América: Civil War comienza con los Vengadores persiguiendo a un malo en algún lugar de Nigeria. A consecuencia de las explosiones, las persecuciones y los objetos volando por los aires, muchos civiles murieron durante la captura. Y da la casualidad de que, entre los fallecidos, había unos ciudadanos de Wakaso Wakanda ¿En serio he dicho Wakaso? ¿En qué estaba pensando? que estaban en Nigeria por no sé qué.

A la gente no le gusta que los Vengadores rompan cosas y maten gente en el trascurso de sus pesquisas. Por eso, el secretario de Estado (o algo así) se presenta en la base secreta de los Vengadores para informarles de que la ONU ha decidido convertirles en un organismo dependiente de las autoridades, y que su actividad estará determinada por ellos. Es decir, que ellos deben autorizar su intervención. El señor secretario les entrega unos papeles (los acuerdos de Sokovia) y les pide que reflexionen la propuesta. Pero todos sabemos que de reflexionar, nada. Es como cuando le pides permiso a tu madre para hacer algo, y ella te responde: "Haz lo quieras". Pero en verdad lo que quiere decir es: "Como lo hagas, te vas a llevar una patada en todo el tronco del oído".

Ahí empieza el drama. Iron Man quiere firmar los acuerdos, pero Chris Evans no. Chris Evans dice que hay que proteger a la gente; que si firman, no los van a dejar hacer nada; que si la justicia y la libertad, blablabla. Iron Man, por su parte, afirma que tienen que ganarse la confianza de la gente; que no pueden poner en riesgo la vida de las personas, blablabla. No voy a entrar en cuál de los dos tiene razón porque lo considero innecesario.

Ah, a todo esto, Iron Man está peleado con Gwyneth Paltrow por no sé qué historia,

Y a Chris Evans se le muere la novia irrelevante que tenía en Capitán América: El primer vengador. Y, en su lugar, aparece su sobrina, que es igualmente irrelevante.

El caso es que se celebra una reunión de la ONU en Viena por lo de los acuerdos, a la que, por supuesto, va el rey de Wakanda. Alguien pone una bomba cerca del edificio de la reunión, y el rey de Wakanda muere. A su hijo no le hace especial gracia.

Se identifica al artífice de la explosión como Bucky, también conocido como el soldado de invierno, también conocido como ese personaje que tanta animadversión despierta entre los miembros de mi círculo más cercano, también conocido como el amigo de Tania. Chris Evans se entera, y decide ir a buscarle, porque "¡Oh! Es mi amigo y tengo que salvarle. Y me da igual ir en contra de la ley, los acuerdos y su puta madre".

Ah, y en medio aparece un tío feo que roba a otro tío un libro rojo con una estrella negra en la cubierta.

Chris Evans y Falcon viajan hasta Rumanía y encuentran a Bucky. Bucky dice: "Yo no fui". Aparece la policía, y Chris Evans y Falcon ayudan a escapar a Bucky. Y en medio de la persecución, ¡tachán! Aparece Black Panther, que no es otro que el hijo del rey de Wakanda, que quiere matar a Bucky por razones evidentes. Se pelean entre ellos, y al final los pilla la policía.

A Bucky lo meten en una pecera, y a los otros tres les quitan los súper trajes. Entonces aparece Iron Man y le dice a Chris Evans: "Firma los papeles". Y Chris Evans: "Que no quiero". Get in the fucking robot, Shinji. De reopente, aparece un supuesto psiquiatra que va a interrogar a Bucky, pero ¡oh! ¡Es el tío feo del libro! Le recita a Bucky la lista de la compra, y Bucky entra en modo berserker. Bucky se escapa, y Chris Evans y Falcon van a buscarle.

Mientras pasa todo esto, la Bruja Escarlata y Visión están en la base de los Vengadores siendo bonitos el uno con el otro.

Chris Evans y Falcon encuentran a Bucky, que vuelve a ser normal; y les cuenta que el tío feo del libro le controló la mente con la lista de la compra y le preguntó por una misión que llevó a cabo en 1991. Entonces se enteran de que el tío feo del libro quiere resucitar a otros cinco soldados de invierno súper fuertes que están criogenizados en Siberia. Chris Evans decide que that's the right thing to do, y llama a Ojo de Halcón para que les ayude. Ojo de Halcón va a la base de los Vengadores, se lleva a la Bruja; y luego aparece con Ant Man, que es un personaje maravilloso. Y, además, es Mike.

Y, por la cara, aparece la sobrina irrelevante a devolverles los trajes. Y Chris Evans la besa. Y yo no entiendo nada.

Iron Man, por su parte, decidido a pararle los pies a Chris Evans, va a buscar a Spiderman, que es el personaje más importante de toda la película, y debe ser amado y protegido sobre todas las cosas. Y la Johansson va a buscar a Black Panther.

El bando de Iron Man intercepta al de Chris Evans en el aeropuerto, y en fin, se pelean entre ellos. En medio de la reyerta, Chris Evans y Bucky se suben a un avión y se escapan a Siberia. Y porque la Johansson los dejó irse. Y yo no entiendo nada. A los otros del Team Cap los detienen y los encarcelan en una prisión submarina.

Ah, y cuando Chris Evans y Bucky estaban huyendo, Visión dispara sin querer a War Machine (que lleva en la película todo el rato, pero nunca nadie se acuerda de él). War Machine pierde el control del traje, se espachurra contra el suelo y se queda medio paralítico. Pero a nadie le importa.

Iron Man se entera de la existencia del tío feo del libro, y de que él es el verdadero culpable. Va a la prisión, y le saca a Falcon lo de Siberia. Iron Man va a buscar a Chris Evans y a Bucky por su cuenta y sin decírselo a nadie porque he was wrong and Chris Evans tenía razón.

En Siberia, Chris Evans y Bucky descubren el sitio donde, supuestamente, estaban los soldados de invierno. Aparece Iron Man, y hacen una tregua momentánea. Entonces, se encuentran con el tío feo del libro, que resulta que se ha cargado a los soldados de invierno antes de resucitarlos. Y como lo que quiere es que los Vengadores se maten entre ellos, le pone a Iron Man un vídeo de aquella misión de 1991 en el que se ve a Bucky matando a sus padres. Iron Man, con toda la razón del mundo, se mosquea con Bucky e intenta matarlo. Pero Bucky se defiende, y Chris Evans defiende a Bucky. "He is my friend" y "So was I" drama happens.

Y mientras tanto, el tío feo del libro se pira, pero Black Panther, que lleva todo este rato siguiendo a Iron Man, lo atrapa.

Iron Man le arranca el brazo a Bucky; Chris Evans se enfada y le clava el escudo en el chisme brillante del pecho de Iron Man antes de huir con Bucky. Por un momento, pensé que Iron Man moría, y llegué a gritar mucho internamente.

Pero no. al final, Iron Man no sólo no muere, sino que vuelve a la base secreta de los Vengadores y recibe una teléfono tope moderno y una carta gay de Chris Evans, que está en Wakanda con Black Panther. Y Bucky decide autocongelarse para no hacer daño a la gente.

Y se acabó Capitán América: Civil War. Fin.

Pero antes, una última reflexión: ¿desde cuándo está tan buena la tía May?

¡Gracias por leer! Se nota que no tenías nada mejor que hacer (¬‿¬ )

lunes, 11 de abril de 2016

La verdad sobre el cosplay y su puta madre buscan piso en Alcobendas.

Desde hace unos meses se ha puesto muy de moda que los cosplayers suban a diferentes redes sociales vídeos bajo el título de "La verdad sobre el cosplay" o similar. Y sinceramente, estos vídeos me parecen una soberana gilipollez.

Vamos a ver. Me gustaría aclarar, en primer lugar, que yo no me considero cosplayer. Empecé a hacer cosplay hace tres años más o menos, y al año no suelo hacerme más de dos. Aún tengo muchísimo que aprender y mejorar. ¿Habrá quien piense lo contrario? Pues oye, muchísimas gracias. Me siento halagada. Pero vamos, ésta es mi opinión. Yo no me considero como tal.

No obstante, sí que estoy metida dentro de la comunidad; y aunque no me considere cosplayer, me entero de cosas. Cosas que hacen que la comunidad cosplayer de mi entorno cada vez me dé más pena.

Son muchas las razones, y quien me conoce un poco sabe de qué hablo. Hay mucha envidia, muchas ganas de hacer daño y ninguna necesidad de ganarte la enemistad de nadie. Pero no es eso de lo que quiero hablar.

A mí lo que me fascina es la gente que sube los mencionados vídeos. Para empezar, estos individuos titulan los vídeos como "La verdad sobre el cosplay", cuando lo único que hacen es dar su opinión. Y cuando digo "dar su opinión", me refiero a rajar de todo Cristo de forma muy gratuita. 

A los ejemplos me remito:

<<Mmm, la comunidad cosplayer en Gran Canaria es una mierda porque la gente es muy envidiosa, y cuando no ganan un concurso, se enfadan y ponen a parir al jurado y a los participantes>>.

Diez minutos de vídeo después:

<<ES QUE YO TENÍA QUE HABER GANADO FESJGFSFHBVSKHFVHGV>>.

¿Qué clase de verdad es ésa? Además, ¿desde cuando un mindundi está en posesión de la verdad universal sobre nada? ¿Qué es, un profeta? ¡Es absurdo! No es la verdad: es tu opinión. Puede estar más fundamentada o no, pero no deja de ser tu punto de vista.

Y también me hace muchísima gracia la gente que hace estos vídeos y critica la comunidad cosplayer cuandO ELLOS O ELLAS SON LOS PRIMEROS QUE HACEN ESAS COSAS DE LAS QUE TANTO SE QUEJAN.

PORQUE LO HACEN. 

ESTO ES GRAN CANARIA. NO SOMOS TANTOS. AL FINAL, NOS ACABAMOS ENTERANDO TODOS.

<<¡Haz cosplay de lo que te guste! ¡Da igual que el personaje sea más alto o más bajo que tú! ¡Disfruta del cosplay!>>.

Y luego, por detrás:

<<Yo soy mejor *inserte nombre de personaje* que él/ella>>.

ES QUE SON GANAS DE HACER DAÑO Y DE SER MALA GENTE PORQUE SÍ

Y HAY GENTE A LA QUE LO QUE LOS DEMÁS PIENSEN DE SU COSPLAY LES DA IGUAL

PERO HAY PERSONAS A LA QUE ESCUCHAR ESAS COSAS LES AFECTA

Y PARECE QUE LA GENTE NO SE DA CUENTA DEL DAÑO QUE PUEDEN HACER

ES QUE

DUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUHHH


A ti, que has tenido el detalle de leer hasta aquí.

Haz tu cosplay.

Disfrútalo.

Llévalo con orgullo.

Y preocúpate de que te guste a ti y a la gente que te importa.

¿El que está a tu lado te ha dicho que tu cosplay mola? Dale las gracias y siéntete halagado.

¿El que está al otro lado ha empezado a decirte todo lo que no has hecho bien? Sonríele y dale los buenos días.

Al final, con suerte, se acabarán cansando de echar veneno por la boca.

martes, 16 de febrero de 2016

Compliments



NP: The Doobie Brothers - Long Train Runnin'

Anoche, mientras esperaba a que llegara el sueño, y a raíz de un post en 9gag y de una noticia de hace un par de días, recordé algo que sucedió hace unos tres o cuatro años. 

Una conocida, cuya preferencia sexual son las mujeres, me preguntó si existía alguna posibilidad de que a mí me gustaran las chicas. La pregunta me pilló totalmente desprevenida, y seguramente puse cara de idiota. Además de haber sido de repente y no tener nada que ver con lo que estábamos hablando justo antes, creo que, quien me conoce al menos un poquito, sabe de sobra que a mí me gusta más un pene que a un tonto, un lápiz. De hecho, por aquel entonces, yo llevaba saliendo con Mr. Pelos un buen par de años. Y esta chica lo sabía, e incluso conocía a Pelos. Por lo que la pregunta me dejó un poco confusa.

Yo respondí que, por el momento, no cabía esa posibilidad. Por el momento. Quién sabe si pasado mañana tengo una revelación y descubro que me siento sexualmente atraída por las mujeres. Pero, a día de hoy, una chica me pone lo mismo que un caldero o un puñado de tierra. Ahora bien, si una mujer es guapa o tiene un cuerpo bonito, soy la primera en decirlo. Soy heterosexual, no ciega.

<<Ya, bueno, quería estar segura y tenía que intentarlo>>, replicó la muchacha. <<Es que me pareces mona, y si te gustaran las chicas, seguramente te tiraría los trastos>>.

Y se despidió y regresó con el grupo de amigas con el que estaba.

Y yo me quedé ahí plantada, como un ficus, sin saber cómo reaccionar. Pero no porque me sintiera ofendida o incómoda. Sino porque me sentía halagada. De hecho, creo que llegué a ponerme un poco roja, porque sentí la cara caliente. Aquélla fue la primera (y, de momento, única) vez que una chica me había dicho que le parecía guapa, mona, atractiva... Da igual.

Y me sentí igual de adulada que si lo hubiera dicho un hombre. O un mapache. O una goma de borrar.

Un cumplido es un cumplido, ¿no? No importa de quién lo recibas. ¿A quién no le gusta que le digan cosas bonitas? Aun si se trata de tu abuela o de tu madre, que aunque seas un craco y más tonto que las piedras, siempre te recordarán lo guapo e inteligente que eres.

Por eso no entiendo a la gente que se siente ofendida, e incluso violenta, si una persona de su mismo sexo le piropea. Que una persona sea sea homosexual, transexual o bisexual y te haga un cumplido no significa que vaya a bajarte los pantalones ahí mismo. Que a lo mejor le gustaría, pero eso es una cosa que, si fuera así, quedaría en su propia consciencia. Es un piropo, no una amenaza, ni una navaja. 

Y, desde luego, no es una razón para humillar o agredir a nadie.

A mí es que lo de la homofobia, la transfobia y la bifobia no me entra en la cabeza. Y mucho menos cuando gente de mi edad, gente joven, son los primeros que promueven este tipo de comportamientos porque sí. ¿Desde cuándo hemos retrocedido al siglo XVIII? ¿En qué momento las personas de mediana y avanzada edad han pasado a ser más tolerantes que la juventud?

A veces la especie humana me da asco.

viernes, 5 de febrero de 2016

Los eBooks no son para mí


El tema de los eBooks, al menos por mi parte, genera discusión cuando sale a colación. Yo me declaro totalmente contraria a los libros eléctricos. Y lo digo bajo la premisa de que tengo uno, y lo he usado. Y mi madre, lectora acérrima de toda la vida, también tiene uno. 

Es cierto que los eBooks tienen muchas ventajas. Palian el problema del espacio que sufrimos los que leemos con asiduidad. De hecho, mi madre es usuaria forzada de eBook porque mi padre le prohibió comprar más libros. Porque no había espacio en casa para ponerlos. Pero literalmente. Y, por mi parte, aunque soy partidaria de donar a bibliotecas o a tiendas de libros de segunda mano aquellos que ya has leído y que, probablemente, no vuelvas a leer, lo de buscar hueco para libros nuevos... digamos que sudo bastante.

Además, el eBook te permite llevarte contigo hasta el libro más grande. Ocupa poco espacio, y es ligero. Imagina cómo acabaría tu hombro si quisieras llevar cualquiera de Ken Folett en el bolso. 

Y lo mejor del libro electrónico, bajo mi punto de vista, es que, en la mayoría de los casos, puedes acceder a libros de manera fácil y gratuita. Basta con buscarlos en Internet y descargarlos. Esto está genial para cuando no tienes pasta, o simplemente, no te la quieres gastar; cuando no estás muy seguro de si el libro te va a gustar, o cuando no lo encuentras en préstamo en las bibliotecas.

Pero, a pesar de todas estas ventajas, lo siento, pero yo soy de libro en papel. No puedo evitarlo. Yo necesito pasar las páginas para disfrutar un libro. Necesito ver cómo voy avanzando, cómo el marcador cada vez se acerca más a la contraportada. Y por no hablar del gustazo de abrir un libro recién comprado, y que el olor a libro nuevo te acaricie la nariz. Y ya cuando el libro es viejo, el gustazo es mayor. Además, con lo bonito que es prestarse los libros...

En definitiva, y para quien quiera un símil que pueda entender, leer libros en formato físico son como hacer el amor con la persona que quieres. En mi caso, que soy mujer, y esa persona es un hombre, digamos que esa parte de su anatomía es suave y cálida, y la sensación en general* es agradable.

Por su parte, leer un eBook es como cuando el ginecólogo o la ginecóloga te hace una citología. Te mete el espéculo, ese chisme metálico, frío, duro y sin amor; y luego te rasca las paredes de la vagina con la espátula de los cojones, a sabiendas de que te va a hacer daño y que vas a pasar uno de los momentos más desagradables del día.

Ahora mismo estoy somatizando lo que estoy escribiendo, y me estoy poniendo malísima.

Y por lo mal que lo paso cuando me toca la revisión en el ginecólogo, yo soy de libros (°◡°♡).:。

* Que no se ofenda nadie, por favor, que es muy fácil ofender a la gente en Internet estos días. He dicho en general. Que tú concretamente, lector anónimo, prefieres destrozar los genitales ajenos y tener tórrido sexo salvaje, es tan respetable como los que prefieren tener slow-sex. Pero tu vida sexual no me interesa lo más mínimo. Sólo espero que sea abundante y satisfactoria 

¡Gracias por leer hasta el final! ♥